lunes, 4 de junio de 2018

2018 JAPON



Abril  JAPÓN 2018

No era Japón un destino por el que sentía preferencia, pero ultimamente varios conocidos me lo recomendaron así que... vámonos. Tengo que reconocer que me ha sorprendido, es un país magnifico en muchos sentidos, la educación de sus habitantes, su amabilidad y como consiguen la sintonía entre lo ancestral y la tecnología punta.  Todas las ciudades estan pulcras y la sensación de seguridad que trasmiten es muy gratificante. 


Día  9 salgo por la tarde para Madrid, encuentro con Maribel.

Día 10 Salimos junto con Carlos y Maribel P, para Osaka a las 12 h, vía Pekin aquí descubrimos que a Maribel le han dado un vuelo diferente¡¡¡¡¡¡, se lo arreglan sin problema pero el susto no nos lo quita nadie, por si no lo sabíamos hay que

REPASAR TODO EN EL MOSTRADOR DE LA COMPAÑÍA AÉREA. 

Hasta Pekín son casi 11 horas de vuelo y tres mas a Osaka, así que la llegada es el

Día 11 a 12,45 hora local, nos vamos a la orilla del río Ido para ver los cerezos en flor:

 La sakura




La sakura, es una maravilla tal y como nos habían dicho, lo celebran como una fiesta y no es para menos, con puestos de comida típica y todos disfrutando de este espectáculo que nos ofrece la naturaleza.

Comida típica

 En este camino está el edificio de la fabrica de moneda. 
Cogemos un taxi (1500 Y) y nos vamos al edificio Umeda llamado Observatorio del jardín flotante, es muy moderno 


Edificio UMEDA



con escaleras mecánicas como en el aire en el exterior y con unas vistas espectaculares de la ciudad desde la terraza.

Osaka desde arriba edificio Umeda


En la parte inferior el edificio tiene jardines con juegos de agua iluminados.
Para subir a la terraza hay que abonar 1000 Y, pero merece la pena.

Desde aquí en un taxi nos vamos al animado y famoso barrio de luces de neón de Dotombori, lleno de tiendas y restaurantes, probamos las típicas bolitas rellenas de pulpo, muy ricas, las hacen por todos lados pero las mejores están en Atchichi Hompo cerca de un canal del río.

Takoyaki


No nos parece nada caro junto con cerveza pagamos 2400 Yenes, probamos el Rame una especie de sopa consistente y por ultimo los exquisitos panes de melón rellenos de helado, ummm, no nos olvidamos de ellos en todo el viaje. Seguimos paseando y nos fotografiamos junto al famoso atleta de neón.

Glico man en Dotombori



Día 12, con el grupo nos vamos a ver el castillo de Osaka muy bonito, en el interior hay una maqueta del edificio y una reconstrucción del salón de té.

 Castillo de Osaka


A unos 35 km está NARA, con el templo de Todaji y su gran Buda de 15 m de altura


      Templo Todaji

Hay muchos jardines y los ciervos campean a sus anchas, los turistas los alimentan con senbei unas galletas para ellos que se compran en el interior del parque.





                                               

El almuerzo es riquisimo en un restaurante junto a un lago y frente a los pabellones reales.

                                Maiko , aprendiz de Gheisa

Durante la comida esta maiko realiza varias danzas.

A 40 km está el santuario sintoista de Fushimi Inari
Impresionante, salió en Memorias de una Gheisa, esta rodeado de caminos que serpentean con mas de 5000 puertas o torii de color naranja, pasear por ellos es una autentica maravilla.


        



Casi estamos en Kioto a 7 km.
En taxi nos vamos al barrio de Pontocho con restaurantes a la orilla del río servidos por gheisas, mas al interior hay unas calles estrechas y tradicionales llenas de restaurantes. Cenamos muy bien carne de potro a la piedra.
Taxi y al hotel.

Día 13 nuestra primera visita es la templo Kinkakuji, este templo budista está entre los mejores del país, con su bello pabellón dorado que parece flotar en el lago. Es patrimonio de la humanidad junto a otros 16 edificios existentes en la ciudad ¡¡¡¡¡.


Pabellón dorado


Hay una bonita casa de té a la salida.

A continuación visita del castillo Nijo una fortaleza medieval con una maravillosa puerta de entrada. El interior muy austero simulando con figuras de tamaño natural las ceremonias de la corte del periodo Edo.



Castillo Nijo


Visita del santuario Heian con unos maravillosos jardines.

                            


Santuario Heian

El almuerzo, muy bueno, es en una casa colonial que en la actualidad es el hotel Fortune Garden.
Cogemos un taxi y nos vamos al templo budista Sanjusangendo, con las figuras de los 1000 budas, impresionante¡¡¡.
Seguimos paseando por la ciudad llena de templos. llegamos a una colina donde hay una pagoda sintoista con vistas de Kioto, la puesta de sol es preciosa.


                                  


 Caminando hacia Gion, el barrio de las gheisas, cruzamos calles tradicionales, mas pagodas y templos, tenemos la suerte de ver dos gheisas caminando silenciosas y rápidas hacia su trabajo. Las casas iluminadas con la bola roja significa que están ocupadas,



Cenamos okonomiyaki las famosas pizzas japonesas en un restaurante muy curioso, junto con cervezas 4900 Y / 4 personas.


Día 14 salimos de la moderna estación de Kioto en el tren bala hacía Miyajima, a esta isla se llega en unos 30 minutos de travesía en barco, es un lugar muy agradable con un santuario sintoista que es patrimonio de la humanidad: Itsukusima.




Los alrededores del santuario son muy bonitos y en la playa está el famoso monumento (Torii) identificativo del país, es enorme, si la marea está baja se puede llegar andando hasta allí.

Miyajima
Miyajima



Volvemos en barco a Hiroshima, vemos el único edificio que quedó en pie tras la bomba atómica,  impresiona, junto con el parque que lo rodea y el monumento a la Paz, así como el museo, muy interesante todo.







Día 15 Hoy nos vamos de nuevo en tren bala a Nagoya, en bus llegamos a los pueblos de posta de Tsumago y Magome







Tienen muchisimo encanto, parece que retrocedes en el tiempo, visitamos una antigua casa "Waki Honsi" de hospedaje de samurais.
Llegamos a Takayama, tenemos la suerte de encontrar a la ciudad de fiesta así que presenciamos Takayama Matsuri con carrozas Yatai. Van en procesión por el centro de la ciudad, muy tradicional con tres calles principales estrechas y con encanto, con tiendas de sake, que hay que probar. Algunas casas antiguas no han cambiado desde el periodo Edo.

Carrozas Yatai


 

                                       Precioso cerezo en el puente Nakabashi


Calle Sannomachi


El hotel nos ofrece una exquisita cena japonesa ataviados con el traje típico (yucata).

                              





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Antes de la cena disfrutamos del onsen (baños con aguas volcánicas), 
¡¡¡¡¡ una magnifica experiencia ¡¡¡¡¡¡¡.


Día 16 hoy visitamos Shirakawago un pueblo Patrimonio de la humanidad con unas casas de labranza con tejados triangulares hechos de paja muy inclinados para soportar el peso de la nieve.
Hay un mirador shiroyama, con unas preciosas vistas del pueblo.

Mirador Shiroyama



                                                          

Visitamos una de las casas típicas.

                    

De nuevo el tren bala de Nagone a Odawara y bus a Hakone, llegamos a nuestro precioso hotel que es un Riokan ( hotel con encanto, japones al cien por cien). La habitación para 4 personas son 440 €.


Riokan Mount- View

La cena es magnifica, tradicional, así como el onsen privado, ¡¡¡¡una autentica pasada¡¡¡¡¡
Se duerme en el suelo pero muyyyy cómodos, antes de dormir viene una señora y la habitación la adapta para dormir.
Inolvidableeeeee.


Día 17 Aprovechamos y antes del suculento desayuno otro baño en el ónse, que maravilla.
Salida al parque nacional de Hakone, paseo en barco por el lago Ashi. En funicular subimos al monte Komagatane pero hay muchisima niebla y no podemos ver nada, otra vez será. Almorzamos junto al lago y continuamos hacía Tokio en autobús 1 hora de camino. 
Subimos a la Tokio Tower copia de la de París desde donde se ven unas vistas espectaculares de la ciudad. Es la mas famosa pero no la mas alta.


              

 Después de dejar las maletas en el hotel, salimos para por primera vez  enfrentarnos al laberíntico metro de la ciudad, la verdad es que asusta el tamaño y la cantidad de lineas que tienen pero logramos llegar a Shibuya, el barrio donde está la estatua del perro Hachico y el famoso paso de peatones Scramble Kousaten, nos hacemos la correspondiente foto y desde un café vemos el cruce desde arriba, es como un enjambre, muy, muy curioso.




  Visitamos el maid café "Maidreamin" con sus camareras disfrazadas de sirvientas, peculiar al máximo.
Cenamos y en taxi llegamos al edificio del ayuntamiento, el mas alto de la ciudad, la subida es gratis y la vista nocturna desde arriba es fabulosa.

Día 18 Hoy amanece lloviendo, visitamos el barrio de Asakusa, uno de los mas antiguo de la ciudad. La calle Nakamise Dori, está repleta de tiendas (hay pan de melón) y al final se encuentra el templo Sensoji, para llegar hay que cruza una enorme puerta Kaminarimon, con una gran linterna. Está lleno de fieles los alrededores son muy bonitos con estatuas de buda y jardines.
Templo Sensoli


Puerta Kaminarimon

En bus hacemos la visita panorámica de la ciudad hasta llegar al distrito de Odaiba muy moderno, recordando a Nueva York, sobresale entre todos el edificio Fuji y las vistas desde aquí de la bahía deTokio son fantásticas.

Al fondo el puente Raimbow


Edificio Fuji TV



Tokio al fondo


La vuelta al centro de la ciudad la hacemos en barco, muy agradable.
Almorzamos en la zona de Giza y caminando por esta avenida llena de tiendas de lujo, llegamos a Hamarikyu, un precioso y tranquilo parque con una casa de té al lado del lago.



Parque Hamarikyu



Seguimos hasta el palacio Imperial cuyo interior no se visita pero si se puede pasear por los alrededores.



Puente del palacio Imperial

Continuamos hasta la bonita estación de trenes, aquí cogemos un metro que nos deja en Roppongi cerca del modernisimo edificio Mori,con comercios, un hotel de 5 estrellas, cine etc.
 Y ya nos vamos a "Mon cheri ton ton", un restaurante que previamente teníamos reservado para probar la carne de kobe y wayu ( dos tipos de ternera a las que miman para que su carne sea exquisita). Fue toda una experiencia, el cocinero nos preparó toda la comida en esta mesa-plancha con una maestría excepcional, todo exquisitoooooo, pedí un tinto californiano que fue demasiaooo, la verdad es que no tengo palabras para definir esta cena, es algo que nunca había experimentado y os aseguro que merece la pena. MUYYYY RECOMENDABLE, a pesar del precio: 155 € por persona, hay que vivirlo.
Lo recomendamos al día siguiente a varios de nuestro grupo y todos coincidieron con nosotros.




Carne de kobe y wayu

Taxi y a dormir muy contentos.


Día 19 La excursión de hoy es a Nikko, está a unas 2 horas en bus de Tokio, son tres templos con un complejo de mas de cien edificios que son Patrimonio de la humanidad.

Nikko

 



Una auténtica maravilla, muy bieen explicados por nuestra guia y el día precioso, además tuvimos la suerte de presenciar una boda¡¡¡.




Subir hasta la tumba del gran shogun.

Para llegar al lago Chuzenji tenemos que subir por una carretera con 48 curvas en 4 km, muy bonito paisaje.

Lago Chunzenji



 Un poco mas adelante está la cascada Kegon.


Cascada Kegón


Vuelta a Tokio desde la carretera se ve el monte Fuji¡¡¡¡¡.
Cerca del hotel hay un buen restaurante con un magnifico súchi. Lo disfrutamos ¡¡¡¡¡.
Subimos a la planta 39 de nuestro hotel ¡¡¡que preciosidad Tokio de noche ¡¡¡.


Día 20 Ya somos expertos en el metro, una vez que lo entiendes la verdad es que no es para tanto, pero claro hay que pasarlo, así que nos vamos al parque Ueno, cerca está el museo Nacional, y en el barrio de Yanaka un famoso cementerio, aquí están las casas mas antiguas de la ciudad que no se destruyeron en la guerra.
De nuevo en metro hasta el parque Yoyogi donde se encuentra Meiji-Jingu. el santuario sintoista mas importante de Tokio.

Parque Yoyogi




Santuario Meiji-Jingu



Muy cerca está la famosa calle Takeshita





Llegamos a la avenida Omotesando donde comemos, recuerda a los campos Elíseos de París. Metro al hotel.
Y nos vamos...el vuelo sale del cercano aeropuerto de Nagasita a las 19,45 h a Pekín, 4 horas y en Pekin retraso: mas de tres horas mas 11 de vuelo a Madrid.

Día 21 Llegamos a las 10,30 horas, aquí también atraso en recogida de maletas, ay ¡¡¡ la compañía china. AVE a Sevilla.



¡¡¡¡¡¡¡¡ ESTUPENDO VIAJE !!!!!!!!



La mayorista ha sido Politours, que como siempre no nos ha defraudado, muy bien organizado, los hoteles bastante bien, los restaurantes casi al cien por cien estupendos, y sobretodo y de manera especial hay que darles la enhorabuena por nuestra guía, una autentica profesional, agradable,solicita y discreta, facilitando todas nuestras peticiones con rapidez y eficacia, una maravilla, desde aquí nuestras gracias.

RECOMENDACIONES: como siempre la época del viaje, nosotros queríamos conocer La sakura, así que tenia que ser en primavera, pero tener la suerte de ver los cerezos en plena floración es muy difícil porque naturalmente no es fecha fija, a nosotros nos acompaño algo: en Osaka pero en el resto del país ya estaba de paso. 
Una de las cosas mas significativas de Japón es la seguridad, no hay casi policía, los niños van solos en el metro, no hay robos, en esto es increibleeee.
La educación es exquisita y su amabilidad algo inaudito, si preguntas por alguna dirección tened en cuenta que ¡¡¡¡OS ACOMPAÑAN !!!!.
Si os gusta la comida oriental, vais a disfrutar porque es buenisima, a veces está tan bien presentada que da pena comérsela ya que parece una pintura, es un espectáculo. A los que no, (ay lo que os perdéis) sabed que en todas partes se encuentra comida occidental. 
Creíamos que Japón era muy, muy caro, pero nada de eso, unos precios muy razonables, podíamos cenar muy bien por unos 10 €, naturalmente el Kobe un poco mas, claro.
Recomendable como he dicho la visita a Nikko y no perderse la cena de Kobe.
Nuestro cambio fue 1 € = 123 yenes
Como siempre ropa cómoda, algo de abrigo para la zona de Takayama y al ser primavera cae algún que otro chaparron.
Otra experiencias que no podéis perderos es la de bañaros en un ónse, ¡¡¡¡solo los hay en Japón !!!, a tener en cuenta el baño es por sexos y totalmente desnudos, no os admiten si tenéis tatuajes. Os aseguro que las sensaciones no se olvidan con facilidad y el relax está asegurado.
Los taxis no son baratos, pero como eramos cuatro, perfecto, mejor que otro medio de locomoción, exceptuando Tokio que tiene una red de metro genial, cuando la ves por vez primera te aterras, crees imposible utilizarla pero con un poco de explicación y la ayuda de los tokiotas, expertos en dos días.
Importantísimo llevar las direcciones escritas en japones ya que el ingles no lo dominan y en muchas estaciones de metro no lo emplean.
Si queréis probar el kobe tenéis que reservar.

Es un viaje muy cómodo, nada paliza, lo peor las horas de vuelo, está lejossss.

Y no me olvido de la compañía, es fundamental en un viaje, así que por supuesto ha hecho que este viaje también sea inolvidable GRACIAS AMIGOS, hasta el próximo...